lunes, 31 de octubre de 2016

Visita Museo de la Memoria (J.Fuenzalida A)


¿Museo de la Memoria? Decidí conocerlo. Comienza en una imponente explanada en que en uno de sus muros están grabados los 30 artículos de la Convención de los Derechos Humanos de la ONU que en Chile tiene fuerza de ley. Después de recorrer el museo, advertí que de esos 30 artículos el museo solo reconoce algunos e ignora otros como los que consagran la propiedad privada (17), a la libertad de expresión (19), de asociación (20) de trabajo (23), de educación (26) y el último (30) que establece que ningún estado puede violarlos, norma no respetada plenamente desde los años 60 al 73.

A la entrada hay una inmensa placa de Bachelet, pero en ninguna parte pide perdón por haber sido ayudista del FPMR cuando ese grupo asaltaba y mataba, según se ha denunciado. La exposición es sobrecogedora. Videos, fotografías, documentos muestran el sufrimiento de mucha gente que fue engañada por el marxismo y por sus revolucionarios de salón que los incitó a actuar fuera de la ley. Esos dirigentes están ausentes. Para el museo no existieron. 

Hay un impresionante muro de tres pisos con cientos de fotografías de víctimas, pero no hay ninguna de carabineros o miembros de las fuerzas armadas asesinados por los izquierdistas y de personas inocentes raptadas por los grupos terroristas de la UP. No son dignos de recordarlos.

Durante el recorrido surge la pregunta, sin respuesta, qué motivó esa violencia, quiénes la incitaron, quiénes la practicaron. Busqué por todas partes documentos, videos y fotografías de los intelectuales y líderes políticos de la izquierda de los 60 en adelante. Altamirano, Corvalán, Allende, etc. o de sus seguidores, Chonchol, Moreno, Trivelli, Garretón, Ominamí, Gumucio, Enríquez, miristas, "cristianos para el socialismo", Mapu, PC, PS, FPMR. Nada.

Tampoco encontré documentos como los acuerdos de los congresos del partido Socialista de Linares (1965) y Chillan (1967) que propiciaron la toma el poder por las armas como lo pregonaba la cubana OLAS presidía por el propio Allende. Así mismo, se ignoran valiosos documentos como el acuerdo de la Cámara de Diputados de Agosto de 1973 (aprobado por más de 2/3) que denunció las ilegalidades del gobierno de la Unidad Popular ; o el pronunciamiento, en el mismo sentido, de la Corte Suprema (Mayo y Agosto del mismo año). Busqué, sin éxito, el acta de la reunión de Frei Montalva, en ese entonces Presidente del Senado, con la directiva de la Sofofa (6/6/73) en que les dijo “este problema se arregla con fusiles”. Tampoco tuve éxito al buscar la carta de Frei Montalva a Mariano Rumor, primer ministro de Italia, en la que le explica cómo se llegó a la crisis que los políticos no supieron resolver y que invocaron a las fuerzas armadas para terminar con el gobierno inconstitucional de la Unidad Popular.

Una visita frustrante, pero a su vez preocupante porque, gran parte de los visitantes del martes cuando fui, eran jóvenes de educación media enfrentados a una muestra sesgada e incompleta y que los monitores que los guían no aclaran, como si se tratara de una tragedia sin origen.

Javier Fuenzalida A.
Profesor, Universidad Finis Terrae


IMPORTANTE COMENTARIO.- 
CUANDO SE QUEMA LA CASA, LO NORMAL ES DETERMINAR LAS CAUSAS QUE ORIGINAN EL INCENDIO Y AGRADECER A LOS BOMBEROS QUE LO HAYAN APAGADO .-

EN CHILE ES INÉDITO E INCREIBLE LOS QUE CAUSARON , COMO LOS RESPONSABLES SALEN A METER PRESOS A LOS BOMBEROS.-

SI ESTAS DE ACUERDO , DIFÚNDELO , CASO CONTRARIO AVERÍGUALO,

Y SI ERES OPOSITOR, SIENTO MUCHO QUE TENGAS AMNESIA.-

Entrevista Verdadera Programa Completo del Miércoles 14 de Septiembre 2016 "José Antonio Kast"

domingo, 30 de octubre de 2016

Carta al Sr. Ministro de Defensa Nacional

Santiago,28 de Octubre de 2016
SR. MINISTRO DE DEFENSA NACIONAL 
JOSE ANTONIO GÓMEZ 
Presente 

 Sr. Ministro: 

NUESTRO Ejército de Chile, en del Día de sus Glorias, lo distinguió con la condecoración “Ejército Bicentenario”, y en sus consideraciones para el otorgamiento de tan alto honor, el General Oviedo resaltaba “...el decidido apoyo público que siempre nos ha prestado (...) y su identificación con el Ejército, entendiendo que éste es, y se siente parte de la sociedad”, y agregaba la autoridad militar que se le distinguía “Como una de las personalidades a quien el Ejército valora por sus aportes”. 

Sin embargo, tres días después, con la medalla casi todavía colgando, expresaba en un diario electrónico, en un acto desleal y fuera de toda norma de prudencia para con el Ejército y refiriéndose a los manidos “pactos de silencio” entre miembros procesados de las FF.AA. que: “ Si yo culpo al actual C.J.E. de las violaciones que cometieron Pinochet y los criminales de esa época estamos trasladando ese al actual mando y lo que tenemos que hacer es que las nuevas generaciones miren hacia atrás , les dé vergüenza los delitos cometidos y que no se establezca una relación de defensa si es que es atacado el actual Ejército.” 

Y últimamente, en otro acto de ingratitud, en la revista “Occidente” de Octubre de 2016, insiste: “El ejercito de hoy no es el ejército de ayer, lo mismo en el caso de la Armada y la Aviación (...) los soldados, clases, oficiales que sienten orgullo de sus instituciones legendarias, que reconocen los crímenes cometidos durante la dictadura y repudia su comportamiento, son los soldados que queremos formar (...) éticamente ese es el camino correcto para desprendernos de ese lastre.” 

Sr. Gómez, soy un General (R) del Ejército de Chile, de ayer, hoy y siempre, y no el que US., en una torpe reflexión, resuelve encuadrar en UNA época. Soy un procesado como cientos de camaradas oficiales, suboficiales, clases y soldados. He ido de frente como soldado siempre con la verdad. El Estado que después me abandonó, me mandó a servir en el lugar, el día y la hora equivocados y me arrepiento de no haber tenido mayor fuerza y coraje por mi grado subalterno, para no verme sometido a un abuso de poder por el cual estoy procesado, como es el caso de cientos de compañeros. 

Sin embargo con la misma fuerza y ya que nadie ha silenciado el desatino y las torpezas emitidas por US., le expresó mi repudio y desprecio, a título personal, a sus afirmaciones. 

Usted ministro, no viene a determinar lo que deben hacer, pensar o sentir las generaciones futuras del Ejército. He tenido el honor de formar promociones de oficiales, muchos de ellos en algún momento integrantes del Alto Mando durante los gobiernos de izquierda, y jamás he sentido el repudio, la condena o la crítica de lo obrado durante la historia reciente del Ejército por parte de ellos. Es más, siempre con ellos, hemos comentado la ignorancia consciente y perversa de la izquierda de meter a todos en un mismo saco, para lograr la destrucción del Ejército de acuerdo a los planes del Foro de São Paulo. ¿Qué autoridad moral tiene Ud para motejar de “asesinos” a una generación que sirvió con orgullo bajo el mando del General Pinochet, cuando en el parlamento, en una dimensión superior, hay algún asesino confeso, que ahora de cuello y corbata, legisla sobre el bien y el mal y varios más indultados en la administración pública? ¿Qué viene a determinar usted lo que es vergüenza para las nuevas generaciones, cuando Chile y su Ejército lo único que debe es sentir agradecimiento y orgullo de las generaciones formadas bajo el mando del General Pinochet, cuando el 74 y el 78, metidos “hasta el cogote” en las trincheras y el barro, estuvimos dispuestos a dar nuestra vida por la soberanía de nuestra Patria y a salvarle el pellejo incluso a gente como usted que seguramente impulsaban en el mundo un bloqueo de armas contra Chile?... y ahora, condecorado por el Ejército.

El General Oviedo en sus cualidades personales resalta el “ser justo” de su acción. ¿Es justo estimar que la Defensa implica contratar, seguramente con recursos de la cartera, un “Comisario Judicial” con evidentes propósitos contralores a la información entregada por las FF.AA. y con evidentes propósitos vengativos? ¿Cree que es ser justo usar un sistema caduco, inquisitivo y arbitrario? ¿ Cree que es ser justo basarse en “ficciones jurídicas” o usar el Estatuto de Roma con efecto retroactivo contrariando sus propias normas? 

¿Cuáles son las generaciones militares que usted desea formar? ¿Podridas como las de Venezuela? ¿ Castradas mentales como las de Bolivia? ¿Un remake del Ejercito de la ex RDA.? ¿Algo así como las de Nicaragua? 

¿Cuál es el lastre del cual desean desprenderse? ¿Matar a los enfermos de Alzheimer, a los ancianos inválidos, a los cancerosos, a los condenados a cientos de años en Punta Peuco? ¿Matar a sus familias, a sus hijos y nietos de pena ? ¿Seguir jugando por siempre “al empate” con su secuela de odio y venganza? 

Ministro, nuestras raíces son tan profundas que nuestros hijos, nietos, padres, hermanos y abuelos tejen una fuerte madeja en las instituciones armadas. Donde corten una cabeza, crecerá otra. 

No lograrán bajar por decreto de nuestros muros las fotos y recuerdos de nuestra historia reciente.”No pueden quitarle a nadie sus dioses. Pueden intentarlo pero los esconderán y les rezarán de todos modos”. 

Eso es tradición, y la tradición unida a la historia, nuestros principios, valores, leyes y reglamentos, son los pilares indestructibles en que descansa el Ejército y sus instituciones armadas. Ya no lo lograron destruir. Se les acabó el tiempo. El resto es música. Música que ya nadie escucha por latera. 

Sr. Gómez, el cargo de Ministro de Defensa es apetecido políticamente. Tranquilo, cómodo, lo asesoran los mejores profesionales de Chile; más de alguno de sus antecesores jugaba a los soldados de plomo. Disfrútelo – si es que ya no le pidieron la renuncia - y sus inapropiadas declaraciones, déjeselas a Kramer. El nos sacará una sonrisa entre tanto odio. 

Lo saluda



HERNÁN NÚÑEZ MANRÍQUEZ 
General (R) del Ejército de Chile de Siempre

viernes, 14 de octubre de 2016

Lorena Iturriaga: "La familia militar no votará por Sebastián Piñera" | CNN Chile

Raúl Meza: "La libertad condicional es independiente de la naturaleza del delito" | CNN Chile

Editorial del Boletín Nº 15 Mis Camaradas

Chile sufre desde hace mucho tiempo la erosión sistemática de los valores cristianos que están en la base de la mayor y más esplendorosa civilización que el mundo haya conocido. 
Seducidos por el inmediatismo y los brillos materialistas y placenteros de la “modernidad”, los hombres fueron renunciando a las grandes perspectivas históricas, a los valores trascendentes y perennes, al esfuerzo ascensional de la cultura, al sentido del deber y al espíritu de sacrificio, ya sea a nivel personal o a nivel social. 
“La historia es maestra de la vida”, sentenciaba el gran Cicerón. No parece superfluo volvernos hacia la Roma imperial, en el momento de su decadencia, para tratar de entender lo que presenciamos en estos días. Tal vez para algunos este ejercicio pueda parecer aburrido y en una fuga hacia adelante, prefieran salir la magnificencia del cargo, la más reciente fiebre de la “modernidad” fútil y vacía. Tal vez Roma hasta en eso no dejará de ser una lección... 
De repente, el drama de esta Patria, una Nación que fue capaz de garantizar al mayor número de ciudadanos un conjunto más amplio de calidad de vida, pero que se condenó a sí misma a la decadencia, me parece calcado de otro drama vivido por otra civilización extraordinaria ‒el imperio romano. Un drama que terminó simbólicamente en una noche de Agosto de 410 DC, en Rávena. 
En esa noche un mensajero (siempre hay un mensaje de un mensajero, el tiempo sólo muda la naturaleza del mensajero) entró corriendo en el palacio de Rávena donde el emperador Honorio se encontraba retirado para escapar del cerco que el rey visigodo Alarico montó alrededor de Roma. La noticia y tan grave los presentes resuelven despertar a Honorio: Roma cayó en manos del invasor. 
Ante esa noticia, el emperador Honorio se declara consternado: “hacía poco que ella comió en mi mano”. El desaliento ante la respuesta desconcertante del emperador lleva a uno de los presentes a aclarar: Roma, su gallina preferida, estaba bien. Había sido la capital de su imperio y no su preferida la que cayó en manos del invasor. Honorio habrá suspirado de alivio pues por un momento pensó que fuese su gallina y no la ciudad la que pereció. 
Hacía muchos siglos que Roma era inviolable. Pero en ese Agosto de 410 DC, el rey visigodo Alarico atravesó la Porta Salaria y entró en Roma al frente de sus hombres. El saqueo comenzó. La propia hermana del emperador, Gala Placidia, estaba cautiva de Alarico, un jefe militar que supo sacar partido de las debilidades del otrora gran Imperio. 
Es necesario decir que el saqueo de Alarico fue sólo el primero ‒y ni siquiera el peor‒ de los muchos que reducirán a la orgullosa Roma a ser un símbolo de la decadencia. En cierto momento, los romanos se anticiparon a los invasores y antes de que montaran un asedio más, les abrieron las puertas de la ciudad para que en el momento del inevitable saqueo se mostraran más misericordiosos. Lo que no ocurrió. 
La historia de la reacción de Honorio al saber del saqueo de Roma fue probablemente dramatizada pero ha servido para ilustrar lo que bondadosamente designamos como decadencia del imperio romano. Frente a esa fabulosa civilización que se condenó a sí misma a la derrota, pocas cosas ilustrarán mejor el comportamiento de las elites romanas que el emperador llorando su gallina y no su ciudad. 
En este siglo XXI, Honorio, su ciudad y su gallina andan por ahí. Simplemente Roma se llama ahora nuestros camaradas presos en Punta Peuco. Y los Jefes Castrenses, tal como el emperador Honorio, desdeñan a los ALIADOS, no resuelven lo esencial, asisten abúlicos a los ataques de que son blancos y ante la injusticia fingen que no ven. ¿O ven solamente la muerte de su gallina? ‒ ¿con cuántas causas fútiles se entretienen semanalmente los altos mandos?‒ y no la caída de sus camaradas? 
En la Escuela Militar aprendí como los romanos hicieron su imperio. En verdad debíamos haber estudiado más como lo deshicieron. Porque Honorio y su gallina no ocurren por casualidad. Ellos son el resultado de una pseudo Familia Militar que se derrotó a sí misma antes de ser derrotada por los otros. De un imperio que acabó teniendo que pagar para no ser atacado por aquellos a los que antes pagaba para que lo defendiesen. 

¿No será que a los Jefes castrenses y a miles de ex uniformados y civiles beneficiados por el Gobierno Militar los atacó el Síndrome de Honorio y su Gallina? 

miércoles, 5 de octubre de 2016

Concedieron libertad condicional al General Raúl Iturriaga Neumann

La Tercera Sala de la Corte de Apelaciones concedió la libertad condicional al General  Raúl Iturriaga Neumann, quien había sido condenado por varios crimenes de lesa humanidad cometidos durante la dictadura.
La determinación de la corte surgió luego que la defensa del ex militar presentara un recurso contra Comisión de Libertades Condicionales, que en primera instancia le había negado el beneficio.
El fallo señaló que "el amparado interpuso recurso constitucional en contra de la resolución de la Comisión recurrida que omitió pronunciamiento respecto a su libertad condicional, recurso número de ingreso 39.997-2016, el que fue acogido por la Undécima Sala, disponiéndose que la Comisión debía pronunciarse derechamente respecto de la concesión del beneficio".
"Sin embargo, en la nueva sesión convocada al efecto, el beneficio le fue denegado, esgrimiendo los mismos argumentos contenidos en la sesión de abril, faltando a su deber de fundamentar la decisión y no atendiendo a todos los antecedentes que daban cuenta de que el interno cumplía todos los requisitos para que se le otorgue su libertad condicional", agregó.
Iturriaga Neumann, de 78 años, debía cumplir su pena de cárcel por lo menos hasta 2037. El condenado tenía una sentencia de 18 años en Italia por el fallido intento de asesinato contra el ex ministro y diputado DC, Bernardo Leighton. En Chile fue procesado por el asesinato del ex comandante en jefe del Ejército, Carlos Prats, y su esposa en Buenos Aires.

(Argumentos  distorsionados, pero en fin, muy buena noticia)


RGH